La suspención es de vital importancia ya que ésta puede definir qué tipo de sonido tendremos y, en el caso de los bajos, la cual puede venir en distintas formas y anchuras.
Su función es la de mantiener al cono en su lugar en conjunto del centrador, y esta controla parte de la excursión ya que, normalmente, estira solo al máximo de excursión del bajo; digamos que, entre más ancha sea esta, más excursión tendrá el bajo, así moverá un flujo mayor de aire y tendremos un sonido potente.
De igual manera, existe un tipo de suspensión la cual tiene forma de “U”; ésta no es tan gruesa, pero debido a la altura que tiene, puede estirar un poco más. Este tipo de suspensión es usada en los bajos que son sometidos a grandes potencias como en SPL.
Las suspensiones están fabricadas de varios materiales, uno de los más comúnes es el FOAM. Este es espuma de poliuretano y es un material muy ligero y le da un menor peso, gracias a esto es más fácil que el cono excursione de un modo rápido y ligero, aunque exite una desventaja, este material es muy sensible a la humedad y a los raspones, por lo que se puede romper muy fácil o deteriorarse con el tiempo, lo mejor con este tipo de suspensión es darle un uso y cuidado óptimos para que tengan mayor durabilidad y desempeño.
Otro de los materiales utilizados en suspenciones de woofers y subwoofers es el Caucho, este hace la misma función que el FOAM pero este es un material un poco más pesado aunque últimamente se ha ido haciendo más delgado, es resiste al agua y a raspones menores, es también muy durable. El Caucho es uno de los materiales que ya está en casi todos los bajos y medios actuales.
Durabilidad y cuidados de las suspensiones
Cada uno de estos materiales tiene sus ventajas y sus inconvenientes y hemos de decir que también, envejecen de modo muy distinto: las de Caucho se van haciendo duras con el tiempo, mientras que las de FOAM simplemente se desintegran con el paso de los años, especialmente si están en un ambiente húmedo y muy especialmente si hay fumadores cerca de ellas.
Las suspensiones de FOAM tienen la ventaja de ser mucho más flexibles que las de Caucho, por lo que es muy frecuente encontrarlas en bocinas de alta eficiencia, de más de 91 dB; pero cada diez años o así (más frecuentemente en zonas húmedas o si hay fumadores) es conveniente revisarlas, para comprobar que no hayan comenzado a desintegrarse; si aparecen rotos o se ven grietas, tendrás que reponerlas, si a simple vista se ven enteras, basta con pellizcarlas suavemente; si se te queda un pedazo entre los dedos, nos indica que estaba a punto de romperse. Este tipo de suspensión no admite otro tipo de cuidados.
Por su parte, las suspensiones de Caucho duran más de lo que te gustaría mantener esas bocinas en tu carro, lo único que les pasa a estas suspensiones es que poco a poco se van endureciendo, va perdiendo poco a poco su eficiencia y calidad en las frecuencias graves.
El proceso de envejecimiento del Caucho lleva (salvo que las bocinas reciban luz directa del sol) veinte o más años para que el efecto sea notable, se le puede mantener aplicando con cuidado una crema especial para suspensiones, existen algunas que huelen muy bien a la hora de hacer el bajeo jejeje, también las hay sin perfume. También podría servirte una crema como, la famosa crema Atrix para las manos o alguna similar.