Toyota Venezuela comenzó a exportar piezas construidas con materiales 100% locales. La primera exportación tuvo como destino Argentina, pero esperan poder llegar a más mercados Latinoamericanos.
El mercado venezolano lleva meses de colapso debido a la crisis económica y a las dificultades de las terminales para lograr acceder a las divisas extranjeras que le permitan poder importar las piezas necesarias para fabricar sus productos en forma local. Venezuela fue en su momento la tercera mayor industria automotriz de América del Sur, pero actualmente las ventas han caído tan bajo, que durante el pasado mes de septiembre tan solo se han vendido un total de 591 unidades.
Tanto Toyota como otras plantas de ensamblaje de automóviles de Venezuela han tenido que reducir la producción debido a la falta de componentes. En ese contexto, Toyota Venezuela comenzó a exportar piezas producidas en forma local, para lograr contrarrestar la situación desfavorable. Esto le permitirá generar ingresos en divisas extranjeras para ayudar a soportar la crisis local e intentar recuperar su capacidad productiva.
Argentina ya recibe las piezas producidas en Venezuela confeccionadas con materiales locales. Esta maniobra le permite a los venezolanos acceder a divisa extranjera.
El director general de Toyota para América Latina y el Caribe Steve St. Angelo, expresó en ese sentido que la clave radica en tratar de encontrar soluciones alternativas, que preferentemente no dependan del gobierno para implementarlas. Toyota comenzó a exportar cuatro tipos de piezas a Argentina, que son confeccionadas con materiales 100% venezolanos, pero esperan poder ampliar las piezas en forma gradual hasta alcanzar un total de 26, incluso a otras regiones de America Latina.
Con esta decisión, Toyota Venezuela logrará hacerse de unos 2 millones de dólares al año, lo cual les permitirá poder adquirir piezas desde el exterior por la misma cantidad de dinero y así poder mantener su planta en producción. Con ésta maniobra Toyota se ilusiona con poder transformarse en la primera empresa de la región en exportar a Cuba.
Sin embargo no todo es alegría, ya que los complejos controles cambiarios vigentes en Venezuela, estipulan que el 40% de los ingresos en divisa extranjera, generados a través de las exportaciones tienen que ser vendidos al banco central venezolano, lo cual los transforma en bolívares utilizando una tasa fija de alrededor de 50 bolívares, una cifra muy, peo muy lejana de los 900 bolívares por dólar, que se pagan en el mercado informal.
Los productores de automóviles ya no saben a que solución recurrir frente a éstas trabas, lo cual los obliga a intentar soluciones alternativas. Sin embargo la mayoría se han visto obligados a suspender la producción.